Calendario Interactivo de Siembra

Bienvenido a tu guía interactiva para planificar tu huerto. Este calendario está diseñado para un clima templado/mediterráneo general. ¡Usa las herramientas a continuación para explorar qué plantar y cuándo!

Planificador por Mes

¿No sabes qué hacer este mes? Haz clic en un mes para ver al instante qué puedes sembrar, trasplantar y cosechar.

🌱 Sembrar

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🪴 Trasplantar

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🥕 Cosechar

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Explorador de Hortalizas

¿Quieres saber el ciclo completo de una hortaliza específica? Elige una de la lista para ver sus detalles y un calendario visual.

Consejos del Hortelano

Semillero vs. Siembra Directa

Semillero: Ideal para semillas pequeñas o delicadas (tomates, pimientos). Permite adelantar la temporada y proteger las plántulas del frío. Directa: Para hortalizas de raíz (zanahorias, rábanos) o robustas (calabacín, judías).

El Clima Manda

Este calendario es una guía. Tu clima local y las heladas tardías son cruciales. Aprende a observar tu microclima y protege tus semilleros si hay riesgo.

Rotación de Cultivos

No plantes lo mismo en el mismo lugar año tras año. Rota los cultivos para evitar el agotamiento del suelo y reducir plagas. Regla simple: Hojas -> Raíces -> Frutos -> Legumbres.

Guías de Cultivo para tu Huerto

Para ir un Paso Más Allá: La Rotación de Cultivos

Este calendario te dice qué plantar cada mes, pero los hortelanos experimentados saben que tan importante como el "qué" es el "dónde". No deberías plantar la misma familia de hortalizas en el mismo lugar año tras año. Esta práctica, conocida como rotación de cultivos, es uno de los secretos mejor guardados para un huerto sano, productivo y libre de problemas.

¿Qué es la Rotación de Cultivos y por qué es Crucial?

La rotación de cultivos es una técnica agrícola ancestral que consiste en alternar los tipos de plantas cultivadas en una misma parcela de tierra a lo largo de diferentes temporadas. En lugar de plantar tomates en el mismo sitio cada primavera, al año siguiente plantarías judías, y al siguiente, quizás, zanahorias. Hacer esto tiene tres beneficios fundamentales:

  1. Control de Plagas y Enfermedades: Muchas plagas y enfermedades son específicas de una familia de plantas. Si plantas tomates (familia de las solanáceas) en el mismo lugar repetidamente, los patógenos que los atacan se acumulan en el suelo. Al rotar con una leguminosa (como las judías), rompes su ciclo de vida y reduces drásticamente la incidencia de enfermedades.
  2. Mejora la Fertilidad del Suelo: Cada familia de plantas tiene diferentes "apetitos". Unas consumen mucho nitrógeno (como las hortalizas de hoja), mientras que otras, como las leguminosas, tienen la increíble capacidad de fijar nitrógeno del aire y devolverlo al suelo. Al rotar, equilibras los nutrientes de forma natural, evitando que la tierra se agote.
  3. Control de Malas Hierbas: Diferentes cultivos cubren el suelo de distintas maneras. Alternar plantas de crecimiento denso con otras más espaciadas ayuda a suprimir el crecimiento de diferentes tipos de malas hierbas.

Una Regla Simple para Empezar a Rotar

No necesitas un plan complejo para empezar. Una de las rotaciones más sencillas y efectivas se basa en un ciclo de 4 años, agrupando las hortalizas por lo que nos dan:

  • Año 1: Hortalizas de Hoja y Flor: Lechugas, espinacas, acelgas, coliflores, brócoli. Son grandes consumidoras de nitrógeno.
  • Año 2: Hortalizas de Fruto: Tomates, pimientos, berenjenas, calabacines. Tienen necesidades moderadas de nutrientes.
  • Año 3: Hortalizas de Raíz y Bulbo: Zanahorias, rábanos, remolachas, ajos, cebollas. No necesitan un suelo excesivamente rico en nitrógeno, pero sí lo airean y lo dejan suelto.
  • Año 4: Leguminosas: Judías, guisantes, habas. Son las "regeneradoras". Fijan nitrógeno y preparan la tierra para volver a empezar el ciclo con las hortalizas de hoja.

Al adoptar la rotación de cultivos, no solo estarás siguiendo un calendario, sino que estarás trabajando en sintonía con la naturaleza de tu suelo, asegurando la salud y la productividad de tu huerto a largo plazo.